Aires de Cambio.


Después de tanto tiempo, después de tantos meses de llorar desconsoladamente sin encontrar una causa definida, después de tanto tiempo sin siquiera tener ganas de escribir, por fin me encuentro mejor.
He cometido muchísimos errores, y por primera vez, me arrepiento de ellos. Le hice daño al objeto de mi amor y a otras personas en el camino, me hice también daño a mí misma.
Nunca pensé que me encontraría sumida en tanta miseria, sin tener ganas de sonreír, de levantarme, de vivir. Ahora sé lo que es tocar fondo, pero por suerte, también sé lo que es volver.
El último mes sobre todo ha sido de cambios radicales. Mis estudios, mis relaciones, hasta mi pelo. Todo ha ido cambiado, evolucionando, pero para mi alegría todo ha ido mejorando.
No imaginé jamás que podría hacerme tanta falta sonreír solo porque si, esa sensación de sentirse completa por un minuto y que todo aparenta estar bien. Me hacía demasiada falta.
Las relaciones en  mi vida van mejorando, ahora tengo un norte, un destino, todo será mejor ahora. No pretendo desvaírme de mi camino otra vez, no cuando mi felicidad y la de quienes amo, está en riesgo.
A veces solo basta apretar los ojos con intensidad, tomar una bocanada de aire, y volver a abrir los ojos, todo parece distinto. De pronto las cosas están claras, y mi corazón está de acuerdo con mi cabeza, y no se disputan en aquella batalla campal que por tanto tiempo estuvieron.
Me siento diferente, me siento más yo, más leal a mí misma, como siempre debería haber sido.
Es lógico que cometa errores, es parte de la vida, pero por lo menos ya no volveré a tropezar en las mismas cosas.
He aprendido, he crecido, he madurado, y ahora ya estoy lista para ser feliz, libre de la prisión que yo misma creé.

Erase una vez.



Erase una época en la que te importaba, una época en la que yo te importaba.
Hubo un minuto en esta vida en que no querías verme llorar, en la que habrías hecho cualquier cosa por no ver una lágrima rodar por mi mejilla.
Hubo un tiempo en el que hubieras dado todo por no separarte un segundo de mí, por no apartarte.
Hubo un día en el que no querías soltarme, no querías dejarme ir, jamás.
Hubo un momento en el que luchaste por mí, por mi felicidad, por nuestra felicidad, por nosotros.
Hubo un período en el que te partía el alma verme sufrir, que hubieras preferido cambiar de lugar conmigo para evitarme cualquier dolor.
Hubo una vez en la que no tenías miedo de estar conmigo, inseguridad.
Hubo una oportunidad en la que tu amor se desbordaba, que casi no te permitía respirar.
Hubo un instante en la que fuimos uno solo.
Hubo un amor, que vencía todos los obstáculos, que nada podía derrotarlo, que nada podía abatirlo.
Hubo alguien que quiso sanar mi alma herida.
Hubo una época en la que me sentía amada y en la que hubieras dado todo por mí.
Erase una época que ya pasó.